07/12/2025 Clarín - Nota - Economía - Pag. 23
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Advierten que creció 40% la cantidad de cheques rechazados Matías Bonell Así lo exponen empresas de distintas industrias. Casi el 50% de las compañías tiene problemas para afrontar algún tipo de obligación. Matías Bonell matbonell@clarin.com La situación que vive hoy la industria no es la ideal. El nivel de consumo viene mostrando algunos altibajos y disparidad entre los diferentes sectores, y no termina de agilizar una recuperación importante. Esta situación decanta en la aparición de distintas variables negativas, y ahora se suma una que comienza a preocupar más fuerte a las empresas. La cadena de pagos, por el momento en la parte más baja de la pirámide de la industria, comienza a mostrar las primeras grietas, con el cumplimiento de obligaciones que se demoran en llegar, o que en algunos casos directamente no llegan. La Unión Industrial Argentina (UIA) le puso algunas cifras a esta situación. Según una encuesta que realizó en los últimos días, nada menos que el 47,5% de los encuestados acusó tener problemas para cumplir con algunos de los pagos principales a los que debe hacer frente. Aquí entran, por ejemplo, salarios, proveedores, compromisos financieros, servicios públicos e impuestos. Incluso, el 8,2% de los empresarios sostuvo que tiene problemas en todos los ítems mencionados, sin dudas una situación mucho más grave. Al tope de los rubros con mayores inconvenientes de pago aparecen dos: impuestos (con un 29,3% de respuestas positivas) y proveedores, con el 26,7%, y uno de los que empieza a prender algunas luces de alerta. Una de esas alarmas es, por ejemplo, lo que está ocurriendo con los cheques rechazados. Si bien en los sectores todavía no tienen cifras concretas, sí coinciden en que durante el último trimestre se dio un incremento de entre el 30% y el 40% en la cantidad de estos instrumentos de pago que resultan no tener fondos para cubrir las deudas. Es por esto que en muchos casos los únicos medios de pago que se comienzan a aceptar son el efectivo y las transferencias. Los problemas con los pagos se dan incluso con aquellos que trabajan con el Estado. Hasta hace algunos meses los plazos convencionales para cobrar iban de los 30 a los 45 días, pero ahora se extendieron hasta los entre 60 y 90 días, u modelo que también contribuye a que la cadena de pagos, al menos, se resquebraje. Este panorama por el momento se comienza a dar más fuerte entre las Pymes -habitualmente proveedoras de grandes industrias-, auque en el mercado sostiene que, de escalar, se comenzarán a ver inconvenientes también en firmas de mayor porte. Gerardo Fernández es el presidente de la Confederación de Pymes Constructoras (CPC) e ilustra la problemática. "Hoy no podemos decir que la cadena de pago está rota, pero sí que se empieza a doblar y a complicar. Se están dando situaciones que no se venían dando y que preocupan", dijo a Clarín el directivo. Fernández habla sobre lo que ve en su sector pero lo cierto es que en otros rubros se replican situaciones similares. Entre las alimenticias, por ejemplo, también hay una sensación de que la cadena de pagos se comienza a complejizar. "Por el momento nosotros en particular no estamos observando inconvenientes fuertes, al menos en nuestro caso. Pero sí es cierto que algunos proveedores nos hicieron saber que tienen problemas con sus proveedores", apuntaron las fuentes consultadas. El problema que puede derivar esto es que, de agudizarse, se verán faltantes de algunos productos -en cualquier industria-. Esto por el momento no ocurre, pero se podría dar por dos razones: o bien porque los productores de la base de la cadena no pagan en tiempo y forma por la mercadería que precisan para trabajar, o -en un caso ya más extremo y hoy no a la vista- porque las grandes industrias son las que incumplen con los pagos, y obviamente terminarían por no recibir los insumos o productos finales. Hoy el caso más palpable en lo que tiene que ver con esta problemática es el de la icónica Bodega Norton. Hace unas semanas quedó expuesta su delicada situación financiera, ya que acumuló más de 40 cheques rechazados por un total de $ 618 millones, mientras que afronta compromisos bancarios por encima de los $ 42.000 millones, una situación que pareciera tender a complicarse. Lo que destacan en algunas empresas también es el poco acceso que tienen al financiamiento bancario, lo que les dificulta afrontar deudas. Afirman que, ante las complicaciones que viene mostrando la industria, las entidades financieras optan por no hacer grandes innovaciones respecto de los préstamos. Lo cierto es que la evolución del financiamiento bancario exclusivamente a empresas en lo que va del segundo semestre de 2025 estuvo marcada por una fuerte contracción real tras la suba de las tasas de interés. Menciones: ceco1 cfinanE 64sf
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