|
17/11/2025 Clarin.com - Nota
Contacto en Francia de una misión privada de mujeres empresarias María Laura Avignolo La ONG Pollera Pantalón se entrevistó con la cancillería francesa, el Centro que representa a la colectividad judía, el hub de start up francés. También, el Senado y el Consejo Económico y Social. Cuál es el objetivo y quiénes integran la ONG. La Torre Eiffel, el símbolo de París París, corresponsal Pollera Pantalón, la ONG de mujeres argentinas que buscan empoderar y emprender con otras mujeres, aterrizaron en Paris en su octava misión internacional. Un grupo lejos de ser feminista, formado por empresarias, banqueras, ejecutivas, profesionales , ingenieras, abogadas, especialistas en tecnología y hasta una sindicalista radical, que se unieron porque creen que a “las mujeres nos falta recorrer un camino en términos de igualdad .No de preeminencia de nadie sobre nadie. Por eso la idea del nombre”. Una nueva versión del empoderamiento femenino , con billetera propia, una agenda intensa internacional, visitas a India, Armenia, Finlandia , Gran Bretaña y ahora a Paris, donde se entrevistarán con las autoridades e instituciones del estado, la Cancillería francesa, el Senado, empresas y organismos civiles. La idea de Pollera Pantalón , también conocido como POPA , empezó en enero del 2018, cuando Argentina preparaba el G20. En una comida en la embajada de Reino Unido solo había dos mujeres empresarias , en una comida de 30 hombres. Una vice ministra británica se sorprendió de que fueran tan pocas y nadie les cediera la palabra. Las instó a unirse . Fabiana Ricagno Así fue como Fabiana Ricagno y Maria Luisa “Maqui” Macchiavello , presidenta de Droguerías del Sur, se lanzaron a este proyecto que las ha unido ,a la que se sumó Maricel Lungarzo, del directorio del banco Comafi y abogada. Les ha dado todas un destino, una solidaridad común y una voz que los lideres extranjeros escuchan cuando llegan a Buenos Aires. Hoy son muchas más y viajan una vez al año al exterior. Todas juntas, para aprender, incorporar experiencias , transmitirlas y hacer negocios. “Y así empezó la idea de Pollera Pantalón. Y así nos fuimos sumando y empezamos a trabajar juntas un poco , con la idea de hacer como un” bypass” respecto de las organizaciones y las cámaras empresarias de hombres , que no nos daban mucha cabida. Entonces dijimos:” va, chao, listo. Vamos por la nuestra”. Abrimos nuestro propio camino. Abrimos nuestro propio capítulo” explica Fafi Ricagno, fundadora y ex presidenta porque es un cargo rotativo. Las mujeres de Popa son poderosas, independientes y autónomas y, sobre todo, divertidas e irreverentes. Prefieren llamarse “apolíticas” porque no tienen vínculo de política partidaria. Pero sí tienen relación con la política de salud, con la educación,con el concepto genérico de la política, pero no de la política partidaria. La filosofía de pollera pantalón En el hotel Castille de Paris, en un salón pedido especialmente para charlar y con champagne de por medio, a pasos de la famosa casa Chanel, Pollera Pantalón y sus 16 viajeras decidieron explicar su proyecto y sus ambiciones, después de un día de correr de audiencia a audiencia. “Como el nombre de nuestra organización lo dice, Pollera Pantalón tiene que ver con una prenda,que puede ser usada indistintamente por mujeres y por hombres. De manera tal que no es menor lo que significa o el nombre. Pensamos que del lado de Pollera Pantalón en esta etapa hay que darle un poco más de empuje al lado de la pollera y menos a la del pantalón porque el pantalón se viene cuidando solo.” relata Fafi, su primera presidenta. Maricel Lungarzo, o Maru para el grupo , es una fanática de Boca, encantada de poder haber conseguido ver el partido contra River en una aplicación, desde Paris. Es una de las dueñas del Banco Comafi y otra de las pioneras del grupo. “La idea no era ser un grupo feminista ni pelearnos con los hombres ni mucho menos sino justamente lograr una igualdad más que merecida en nuestra opinión. Por eso el nombre y por eso estar compartiendo en equilibrio . Igualmente no es nuestra intención que haya hombres en el grupo. Pero la idea no es pelearnos con ellos sino poder abrirnos nuestro camino y ayudar. Empoderar a las mujeres que le faltaba quizás un poco de esa iniciativa. Visibilizar enormes e impresionantes mujeres que hay en el país y que, con una ayudita, pueden subir a la superficie y mostrar lo que hacen que son muchas” cuenta. Es ella quien explica que detrás del nombre se esconde otra forma de ejercer el liderazgo en una empresa y en la vida, con otros códigos . “Y justamente en el juego de palabras estaba metido la pollera y el pantalón, la parte masculina y femenina. Y nos pareció muy divertido el nombre y bastante representativo. Y además la gracia de “se ponen los pantalones”. La idea de ponerse los pantalones, que muchas veces representa tomar el mando. "Tomar las riendas, como de la vida propia. En general se asocia a los hombres. Pero que también “hace fit” al menos con todas las mujeres que integramos este equipo. Y en un espacio donde sí importa ser solo mujeres. Porque manejamos otros códigos. Porque en los espacios de trabajo no tiene que ver solamente con cuántos hombres o con cuántas mujeres. Es que se habla en códigos masculinos . Se entiende el liderazgo en los términos en los que se vinculan los hombres unos con otros . Y hay otra forma de liderazgo. Y hay otra forma de desarrollarse en cualquier ámbito profesional. Desde el más cercano a las actividades asociadas tradicionalmente con mujeres hasta las más lejanas, quizás, como la tecnología. Hay una forma de hacer las cosas que tiene códigos femeninos, que es igualmente poderosa y es igualmente merecedora de ese espacio en el que hoy predominan hombres” sostiene esta abogada y emprendedora, con un marido cómplice, solidario con sus ideas. No compiten entre ellas Pollera Pantalón emprende giras anuales . Esta vez son 16 las que aterrizaron en Paris y se entrevistaron con la cancillería francesa , el CRIF; que representa a los judíos en Francia,visitarán el centro de star up francés, el Senado, el Consejo Económica y Social, cenarán con senadoras. Son ellas: la abogada penalista Marta Nercellas, la especialista en tecnología y directora de Softtek , Ariela Fefer, la sindicalista María Inés Costilla, la consejera ambiental Silvina Dalton y productora del dulce de leche San Ignacio, la CEO de Ricagno, Mariana Bisso Ricagno, que produce zapatos en Italia, la fundadora y abogada “multitask “ Fabiana Ricagno, la ingeniera Maria José Ortega, la abogada Natalia Valdez, especialista en medio ambiente, la ingeniera Marina Rosso Siverino, fundadora de Titicom , la economista Fabiana Bisso y Maria Luisa “Maqui” Machiavello, directora de Droguerías del Sur. Marta Nercellas Popa tiene códigos femeninos y se respetan. “Somos compinches. Nos reímos. No competimos entre nosotras. Tratamos de darnos fuerza a las ideas de cada una. Tenemos altibajos. Hay espacios donde nos sentimos más inseguras. Donde necesitamos quizás como una reafirmación de una colega para salir adelante. No tenemos ejemplos y queremos serlo. Con lo cual es lo mismo si sos hombre o mujer, nos ponemos la pollera pantalón” define Fafi Ricagno. Marina Roso Siverino es ingeniera y ha trabajado en un mundo de hombres. Establece las diferencias, cuando la pregunta es si la solidaridad es muy importante en el proyecto. “Como carrera que tengo que viene del mundo masculino, creo que lo que tienen las mujeres en general, las que tienen un liderazgo femenino- porque también las primeras líderes copiaban liderazgos masculinos- es la relación no transaccional. El tema de ser compinches, de no competir, de alegrarnos por el crecimiento de la otra y de empujarla. Yo que trabajo inmersa en un mundo de hombres, en general existe la transaccionalidad. Yo te paso este dato, ¿cuánto cuesta? En este grupo de mujeres, que cada una en su rubro es casi número uno en muchos casos, no existe eso. Yo te ayudo porque me alegra tu crecimiento, no porque me vas a pagar una comisión. Es un código masculino”, explica. Para la ingeniera y emprendedora , “el capital social que comparten las mujeres no tiene precio . La sororidad, de alegrarse, de no esperar una retribución económica, que no tiene nada mal, queremos ganar dinero y esta organización también tenemos mujeres con hambre de poder, porque es algo que por ahí es criticable que muchas veces las mujeres quieren crecer. Pero crecer significa hambre de poder, significa competir de igual a igual. Y acá no hay un espacio de víctimas. No hay un espacio de mujeres masculinas. Hay un espacio de mujeres femeninas, que nos gusta hablar de zapatos, nos gusta hablar de moda. Pero también queremos cobrar el mismo dinero que ustedes. También somos felices abriendo nuestra billetera” sintetiza esta ingeniera.. Solidaridad y maternidad ¿Y qué rol cumple la maternidad en esta solidaridad entre mujeres ¿Pensamos diferentes de los hombres porque tenemos hijos o tenemos la posibilidad de tener hijos, porque tenemos otro vínculo? “Creo que ancestralmente nosotros tenemos eso de pensar en el cuidado del otro. Lo llevamos todas encima. Creo que nos brota, lo mismo a nuestros empleados. Nosotros vamos más allá. ¿Qué te pasa? Esa cara no es la misma. Tenemos esa cosa maternal, de empatía, de ocuparnos. Creo que eso ocurre y es muy duro para las mujeres que son madres tener que postergar sus carreras. O sabemos historias de muchas líderes, que la han dejado totalmente de lado. O tiene una red de soporte, no existe una exitosa profesional y madre. Si hay, es porque o el marido resignó la carrera o porque la abuela se ocupó de los chicos” explica la ingeniera, experta en comunicaciones y tecnología. Ariela agrega el factor emocional.”Uno puede liderar desde la cabeza, obviamente, pero le puede dar un toque emocional a esto de la comprensión, el entendimiento, muchas veces el empujón, el escuchar. Me parece que la parte de escuchar tal vez nos puede salir un poco más simple. Agregar que las que tenemos oportunidad de convivir en lo que es trabajo con nuestra parte maternal y crianza, tiene que ver con esa posibilidad de manejar muchos temas al mismo tiempo. Como que la mujer que tiene su familia, sus hijos, en su agenda de trabajo por más que esté trabajando, está como manejando la agenda: a qué hora sale, si está enfermo, si tiene que llevar algo para comprar al colegio. Creo que esa capacidad nos da mucha fuerza y mucho poder en el momento de trabajar y tomar decisiones, porque realmente manejamos muchas variables al mismo tiempo de alto impacto. O sea, las que sean profesiones como las que sean personales” Todas coinciden : las mujeres son “multitask “y es una capacidad intrínseca , que los hombres no tienen. . Para Ariela, “naturalmente podemos manejar muchos temas al mismo tiempo. Por naturaleza propia. Es una manera natural". Para Fabiana Ricagno, “ es algo inherente a nuestra biología. Me parece que los hombres y las mujeres no somos iguales definitivamente. Que tenemos como funciones biológicas distintas. Somos distintos y eso debería ser una ventaja y no un capitis diminuto. Y lo explico por esta cuestión que tiene que ver con que el solo hecho de la naturaleza de la maternidad hace que la mujer, en todo su proceso de gestación y de cuidado de los chicos y de cuidado de la casa, pueda hacer siete cosas al mismo tiempo. Es inherente a la biología de la mujer”. Maricel es abogada y banquera. “ Y por eso es tan interesante la diversidad en los ámbitos de trabajo, en los directorios. Yo también estoy en una industria en la que no hay muchas mujeres. Es increíble ver cómo siempre sos la que piensa distinto o la que ve la misma situación desde otra óptica. Para mí es riquísima la diversidad en los directorios. En mismo tema tenés el 360 de cómo verlo y la empatía que pone la mujer en el mismo problema es totalmente distinta a la visión que tiene un hombre , que es más focalizada y plana en un ángulo”. Mujeres en el directorio -¿Los hombres aceptan las opiniones en un directorio o en una empresa?, se les preguntó. “Yo creo que no hay que preguntarles. Es un problema de ellos si lo aceptan bien o mal. Nosotros simplemente tenemos que decir cuál es nuestra opinión de la mejor manera posible porque para eso somos mujeres, para hablar bien. Pero lo que ellos piensen y trataremos de que nuestra opinión valga y para que valga, la tenemos primero que hacer oír y después respetarlas nosotras mismas. Es decir, tenernos fe que lo que estamos diciendo es realmente valioso e importante para los lugares que estamos ocupando. Pero para hacerlo oír hay que repetirla varias veces. A veces tenés que estar dando pruebas todo el tiempo. Te están tomando pruebas y en realidad si uno se preparó, estudió, trabajó el tema, simplemente es presentarlo con toda la evidencia que tengamos encima” explica Maricel. Mariana, ingeniera, coincide con Marisel. “A mí me sucede bastante que por ahí se minimizan aspectos que en un proyecto, por ejemplo en la tecnología, se suelen minimizar los aspectos que parecen fáciles. El enchufe, la energía eléctrica. Porque ellos piensan en el gran proyecto, en los data,centers, en los servidores. Y la mujer, que tiene esa visión integral de preguntar ¿y dónde lo van a enchufar? Y te digo que han habido proyectos que han demorado un año, el wifi en un subterráneo, por esa pregunta tonta. Yo siempre pido perdón y no permiso. Porque es de ningunearte decirle “no, pero eso no importa”. ¿Cómo que no importa? Vinieron los equipos de Estados Unidos, pasaron la aduana y ahora, a un año, tienen que licitar la energía en los túneles. Entonces la mujer tiene esa visión de la ingeniería. Se da cuenta de que eso es peligroso. Está perdiendo agua arriba de un enchufe, ¿no?”, reflexiona. Fabiana( Fachu) tiene un master de comunicación y explica los tabúes de la convivencia con los hombres. “Al menos yo y muchas de las mujeres que conozco y con las que me vinculo, y hablo de mujeres profesionales, que tienen una carrera, que no se dedican exclusivamente a sus casas, desde chiquitas, e incluso en conversaciones, no hablan de plata. Está como mal visto que una mujer hable de guita, de monetizar, de decir ¿cuánto ganás vos? Y los tipos sí hablan de eso. Esta es una cuestión que también quizás hace que nos cueste más a nosotras decir: “ pará, pará, yo valgo tanta guita”. No, a mí no es que me esforcé: valgo tanto, nos cuesta monetizarnos. Y el mercado no lo reconoce”. Para Marta Ortei, “el común denominador de lo que todas expresamos acá tiene que ver con creérnosla. Y en definitiva, inclusive, hablar de dinero o no hablar de dinero es una manifestación de hablar o no hablar del poder. Las mujeres fuimos educadas para no hablar de poder, entonces siempre estamos como ahí medio acobardadas, pidiendo permiso, inclusive las que hemos hecho una carrera. Entonces creo que el gran secreto es a partir del momento en que uno se la cree de verdad, uno cree que verdaderamente saltó y esto es una cuestión de actitud que creo que a todas nos ha pasado, de todas las mujeres que forman parte de esta organización, que hoy son muchas, pero especialmente de aquellas que iniciaron este camino en el 2018, y me incluyo primero en la lista, no somos las mismas. No somos las mismas personas. Nos transformó la vida en lo relacional, en la cuestión de creérnosla verdaderamente, de valorar nuestra capacidad de trabajo, nuestro empuje, para verdaderamente tener confianza en nosotras mismas”. Graciela Adán no está en el viaje pero fue la impulsora de las curadurías ella la que primero veía con su expertise de cientista política si podía o no ese tipo de perfil estar en el grupo original. Querían poder preservar esta camaradería. Esta forma que tenemos de no competencia y de colaboración. No todas las mujeres tampoco tienen los mismos códigos, hay de todo en el mundo. Dos eventos anuales Pollera Pantalón tiene dos eventos fijos. Uno es un viaje anual , a algún lugar donde pueden aprender primero y después, trasladar conocimientos y tender puentes con la parte del grupo que no viajó o los trabajos de cada una. Tienen un premio anual, con tres categorías fijas, que está n vinculadas a la tecnología e innovación, a la formación ciudadana, a la educación. Son tres ejes que son fijos, y un cuarto que eligen cada año. “Hacemos una selección de proyectos, obviamente liderados por mujeres, en los cuales creemos que necesitan visibilización y, hacemos una selección entre nosotras. Votamos a ver quién nos parece mejor o no. Terminamos en un evento anual, haciendo la entrega de premios a esas tres categorías fijas, más la cuarta que se hace en cada año, que se elige en cada año. Más allá de eso, hacemos reuniones, charlas”, explican. Maria Inés Costilla es una fundadora. Sindicalista del sindicato de empleados de comercio, fue invitada por Fafi Ricagno desde el inicio. “Estoy desde el comienzo, que me invitó Fafi y las fundadoras , cuando hicimos la primera misión al Reino Unido. Fue una experiencia extraordinaria. Poder comentar lo que era la vida sindical de Argentina en ese espacio. Es un equipo de mucha contención. Eso da fuerzas ,en un mundo muy masculinizado, para proyectarnos y para generar unas esperanzas de que verdaderamente podemos cambiarlo. Creo que con el espíritu de cada una de ellas, yo me nutro cada día. Creo que podemos mejorar esta situación en la que vivimos. Sin duda tener mejores condiciones para nuestros trabajadores y trabajadoras en la Argentina. No es un espacio fácil, por supuesto. Soy una militante sindical , que además milita en la Unión Cívica Radical”, cuenta. Viajan para aprender, transmitir, hacer negocios La mayoría de las mujeres de Pollera Pantalón son empresarias. “Nosotros somos la empresa” asegura Fafi. “No conozco una sola persona con la que me encuentre que le nombre Pollera Pantalón y no me diga que no lo conoce” admite. Las integrantes de Popa viajan para aprender y para transmitir. Con ese objetivo llegaron a Francia. “Aprender para dónde va el mundo de primera mano, sin que lo mastiquen, la cuestión del pensamiento de los líderes. Ir directamente a las fuentes. Hay un nuevo orden mundial y Francia tiene un rol preponderante en la Unión Europea y tiene muchos despelotes internos, aunque lo nieguen”, proclama Fafi. En sus viajes buscan conocer, adquirir mejores prácticas, adaptarlas , hacer negocios. Por eso fueron a Finlandia, el país más feliz del mundo y el número uno en innovación y educación. En Francia la agenda es amplia y diversas. El Ministerio de Relaciones Exteriores , el Consejo Económico, Social y Ambiental , el Senado y una comida con tres senadoras, el Crif, que reúne a la comunidad judía, y Paris Photo. “Vamos a aprender de mejores prácticas para traerlas a nuestro país y aplicarlas. Y decidieron irse a India.¿Cómo no vamos a ir a la mayor democracia del mundo? Un país que nos queda lejos pero, con Silvina hemos traído una representación siendo una empresa india, de huella de carbono hídrica, para toda Latinoamérica” contó la ingeniera Rosso Siverino. En India investigaron la industria farmacéutica. El 88 por ciento de los antibióticos del mundo se produce en India,Educación e innovación. Quince días intensos e inolvidables de una cultura muy distinta. . La tecnología, el objetivo fundamental La tecnología es un tema fundamental para Pollera Pantalón. Muchos de sus miembros son ingenieras y expertas en tecnología. Ariela cuenta que “tuvimos una oportunidad de hacer mentorías a emprendedoras. Nos asignaron tres grupos de mujeres , que presentaron emprendimientos en GIAE, el programa de naves. Y asignaron a Pollera Pantalón a hacer un acuerdo y poder relacionarnos. Armamos un comité del equipo de mujeres de Pollera Pantalón y les dimos seguimiento. Les mentoríamos un proceso de poder llevar adelante ese emprendimiento para terminar de lograr ponerlo en valor y activo. Fue una experiencia muy enriquecedora, para las dos partes”, recuerda. También lo determinaron como un eje de la premiación y buscan mujeres que hagan esos emprendimientos con tecnología o con innovación, que tengan un alto impacto en la sociedad. "En los últimos años que hemos tomado esa decisión han sido sobre todo mujeres que han empezado a ganar muchos otros premios también después de haberles hecho ese puente, esa visibilización". Un cambio de vida Maria Luisa Machiavello es una empresaria argentina. Durante años fue directora de las Droguerías del Sur, en un mundo de hombres. Hasta que Pollera Pantalón llegó para cambiarle la vida. María Luisa Macchiavello En Paris, champagne en mano, cuenta su transformación: “El 2018 para mi era un mundo totalmente distinto. Toda mi vida he trabajado con hombres por todos lados que, de repente, te valoraban más o menos. En el 2018, en un desayuno en la Embajada de Inglaterra, estábamos Fafi y yo solamente. Todos hombres , por todos lados . Había una diputada o senadora inglesa, a quien todo el mundo le rendía pleitesía y le hablaban. De repente nos mira y dice: “Ustedes por qué son las únicas que están acá”. Y nosotras respondimos: “Porque no hay mujeres en ningún otro lado”. Yo había ido por la Cámara de Comercio. A partir de ahí Fafi y yo empezamos a hablar. Para mí se abrió un mundo totalmente distinto, impresionante. Las amigas que yo tenía hablaban de cosas de mujeres nomás y yo me aburría enormemente. Descubrí un mundo de mujeres, que pueden hablar de las cosas de mujeres , de tacos y tinturas, mamaderas y por otro lado, hablar de temas re profundos. Es un mundo totalmente distinto, que me cambió la vida”.
Acceda a la nota web del medio ![]() |
||



