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13/11/2025 Clarin.com - Nota
Quirno ya está reunido con Marco Rubio en el Departamento de Estado Paula Lugones Washington. Corresponsal El secretario de Estado de Donald Trump dio la bienvenida en español al canciller argentino. Se retiraron a un encuentro privado para afianzar la relación bilateral. El secretario de Estado Marco Rubio y el canciller Pablo Quirno antes de su reunión en el Departamento de Estado (EFE). “Bienvenido”, saludó el secretario de Estado Marco Rubio al canciller Pablo Quirno y le estrechó la mano ante los fotógrafos en el Departamento de Estado. Rubio habló en español y el argentino también le contestó con un “gracias”. Después de esa breve ceremonia, con las banderas de EE.UU. y Argentina a sus espaldas, comenzó la primera reunión formal en Washington entre los ministros para afianzar aún más las relaciones bilaterales. El saludo fue en el Salón de Tratados Colin Powell, un coqueto salón oval en el séptimo piso del Departamento de Estado, flanqueado de columnas jónicas pintadas de dorado y con retratos de cancilleres republicanos como Condoleezza Rice y Henry Kissinger, entre otros. Fue el primer encuentro de Quirno como canciller con Rubio, de origen cubano. Después de las fotos de rigor, ambos se retiraron sin hacer declaraciones. Una periodista estadounidense le preguntó a Rubio si tenía algún mensaje para los agricultores de Estados Unidos, en referencia a las protestas de ese sector por un anunciado aumento de cuota de ingreso de carne argentina. El estadounidense no contestó y ambos se retiraron para iniciar su encuentro en privado. La reunión entre Quirno y Rubio refuerza la alianza estratégica de Estados Unidos con Argentina, que más allá de los encuentros bilaterales y palabras, también se muestra con hechos, como el auxilio financiero de US$20.000 millones que el Tesoro dio al país para estabilizar los mercados antes de las elecciones legislativas del 26 de octubre. Antes de su reunión con Rubio, el canciller se reunió con empresarios en la Cámara de Comercio. Lo acompañaban Oxenford y el jefe de misión Juan Cortelletti. Allí, ante líderes de empresas estadounidenses interesadas en invertir en Argentina, ambos hablaron de las oportunidades que se abren en el país, sobre todo en minería y energía. El encuentro en el Departamento de Estado es la última actividad de la agenda de Quirno, que regresa esta noche a la Argentina. El miércoles se había reunido con empresarios y miembros del Meridian International Center, un think tank vinculado a la diplomacia y los negocios. La empresa anfitriona del evento fue Chevron, uno de los principales inversores en Argentina. Quirno y Oxenford pronunciaron discursos en los que resaltaron las oportunidades actuales del país, sobre todo en sectores como energía y minería, las reformas económicas y comerciales, el RIGI, y otros temas. Entre los empresarios que escuchaban se encontraban representantes de AstraZeneca, Cargill, Glencore, Mastercard, Pepsi, NBCUniversal, Salesforce, Boeing, General Motors, Emerson, 3M, Delta Airlines, Merck y otros. Más tarde se reunió con el Representante Comercial Jamieson Greer y por la noche cenó en un encuentro privado con miembros del Consejo de las Américas. ¡El entusiasmo en Estados Unidos por nuestro progreso es enorme!”, escribió el canciller en su cuenta de X hacia la noche. Quirno destacó su encuentro con la presidenta del Consejo Susan Segal y el vice Kevin Sullivan, pero no hubo detalles de lo que hablaron con Greer. El representante comercial es un hombre clave hoy en la negociación del acuerdo bilateral, que viene negociándose hace meses y que todavía no ha sido anunciado, a pesar de que varias veces el gobierno ha dicho que era inminente. De eso seguramente habló Quirno con Greer en su reunión este miércoles. Más allá de las expectativas, es posible que Quirno se vaya sin anuncios. Si bien se negocia en estricta confidencialidad, se trataría de un pacto arancelario recíproco con posiciones preferenciales para alrededor de 100 ítems estratégicos. Esos artículos quedarían exentos de las barreras de entrada tanto en Argentina como en Estados Unidos. También podría aumentar la cuota de ingreso de carne argentina, entre otros puntos. Antes de que Quirno partiera a Washington, el embajador Oxenford y el ministro Luis Caputo habían dicho que el pacto comercial está “prácticamente terminado”. Y que “depende de encontrar el momento adecuado de las partes para ponerle el moño y comunicarlo”. Estas declaraciones generaron enorme expectativa sobre la firma final del acuerdo estos días. Pero el panorama es más complejo. Fuentes al tanto de las negociaciones dijeron a Clarín que, si bien es verdad que todo está prácticamente cerrado, la demora del anuncio se debe más bien a elegir el momento adecuado para hacerlo. Y que los reparos vienen sobre todo desde el gobierno de Trump. El respaldo al país le ha costado a Trump un dolor de cabeza interno impensado. En el medio del shutdown, que ayer se levantó pero mantuvo a la administración pública de EE.UU. paralizada por 43 días, con cientos de miles de empleados sin recibir sueldo y personas vulnerable sin asistencia alimentaria, hubo quejas públicas de diversos sectores por la ayuda a la Argentina. Legisladores y ganaderos protestaron también por el anunciado aumento de cuota de carne argentina. Trump y el Secretario del Tesoro Scott Bessent tuvieron que salir a aclarar varias veces que Argentina es un aliado “estratégico” para frenar el avance de China en la región y que no era un “rescate” sino una inversión que finalmente dio ganancias a EE.UU. Antes de partir, Quirno fue cauteloso. “No nos gusta anticipar cosas hasta que no esté la tinta seca”. Y completó: “Quedan cuestiones técnicas a terminar, y el anuncio llegará cuando llegue. Pero nosotros somos optimistas que va a ser pronto”.
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