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12/11/2025 BaeNegocios.com - Nota

La aceleración de la inflación impactó en el salario real, que siguió cayendo
Mariano Cuparo Ortiz


La inflación volvió a acelerar y fue del 2,3% en octubre. Lleva así cinco meses sin desinflación, de la mano de las inestabilidades del tipo de cambio en período electoral, aunque con un bajo pass through, dada la baja del salario y la actividad económica, que limita las chances de remarcar precios por la escasa capacidad de compra. Como el holgado triunfo electoral en las elecciones de medio término aminoró presiones sobre el dólar, hay expectativas de una leve desaceleración hacia adelante, aunque lejos de un IPC mensual empezando con cero. La aceleración inflacionaria de los últimos meses golpeó al salario real, que cayó en septiembre.
Pese a la aceleración inflacionaria de octubre, luego de un 2,1% en el dato de septiembre, el ministro de Economía, Luis Caputo, celebró porque la “media móvil de 6 meses de la inflación general continuó descendiendo y se ubicó en 1,88%, siendo la más baja desde enero de 2018”, por lo que, dijo, “el proceso de desinflación continuó a pesar de la caída en la demanda de dinero generada por la incertidumbre electoral y los intentos de la oposición de romper el ancla fiscal en los últimos meses”.
Desde el Grupo SBS destacaron, en cambio, que una medición más corta, de tres meses, arrojó que el promedio geométrico de 3 meses para la general y la núcleo estuvo en 2,1%, cortando una racha de tres y cuatro meses, respectivamente, por debajo del 2%. Para el economista de Equilibra Gonzalo Carrera, que la media se haya ubicado en 1,88%, es decir en torno a 2%, implica que “aún resta mucho”.
En cualquier caso, aunque se interrumpió la desinflación, con una tendencia casi ininterrumpida a la aceleración en los últimos cinco meses (en agosto se mantuvo en un 1,9% idéntico al de julio, ni aceleró ni desinfló), se destacó el bajo pass through. En ese sentido, el bajo nivel de actividad, de la mano con un consumo relativamente frenado, ayudó a moderar la estabilidad nominal, pese a la suba del dólar. En ese mismo sentido, una potencial recuperación del la actividad podrá implicar un freno a la esperada desinflación.
Desde el CEPA afirmaron: “La evolución de la inflación estuvo atravesada por la caída de las ventas, un consumo que no repunta y topeo de salario, y la política de anclas sustentadas en el topeo de los aumentos de tarifas, medicamentos y prepagas”.
Y desde LCG agregaron que un repunte en la actividad podrá implicar que la esperada desaceleración sea menor: “En el corto plazo, expectativas de depreciación moviéndose a la baja y el spot alejándose del techo de la banda restarán presión sobre precios. Lo mismo aplica con la actividad moviéndose muy débilmente y con el disciplinamiento que impone la apertura de las importaciones. Ambos factores, limitan el traslado a precios de cualquier suba de costos, muchas veces yendo contra márgenes de rentabilidad del sector minorista. Con una perspectiva de más largo plazo, vemos difícil que el nivel de inflación converja rápidamente a tasas de un dígito anual. La inercia sigue siendo relevante y restan aún correcciones de precios relativos a la vez que una actividad más dinámica podría alentar pujas distributivas ausentes hasta el momento”.
Mientras que LCG prevé algunos meses todavía en torno al 2%, desde el Grupo SBS sumaron que “mirando hacia noviembre, los datos de alta frecuencia muestran, a la primera semana del mes, una marginal desaceleración desde el ritmo al que cerraron octubre”.
El salario real corre desde atrás a la inflación
En paralelo a un empleo que no deja de caer en el sector registrado en general, y en el privado en particular, el salario real volvió a caer durante septiembre, de la mano de la aceleración inflacionaria y un ritmo de paritarias que se mantuvo limitado durante el año. Así, el salario registrado anotó una baja del 0,8% real en septiembre y, en la comparación contra diciembre del año pasado, un retroceso del 0,4% real, dada una suba nominal del 21,5% a lo largo del año y una inflación del 22% acumulada hasta septiembre.
Desde el Iaraf destacaron que "respecto a noviembre de 2023 los salarios privados registrados se encuentran 0,7% debajo y los del sector público un 14% debajo". Es decir que la dinámica todavía no logró recuperar los niveles previos a la llegada del Gobierno actual y corrió por detrás de una inflación que, para colmo, desde junio retomó el camino hacia la aceleración, promediando 2,1% en los últimos tres meses.
A la vez, la contracción de los salarios, con su impacto sobre los niveles de consumo, junto con la pérdida de 223.000 empleos desde noviembre del 2023, fueron claves para mantener a raya el nivel de pass through, de forma tal que las empresas no pudieron trasladar a precios los incrementos de sus costos. La pregunta es qué sucederá con esos precios si la actividad y el salario repuntan.
El empleo también cae
El empleo registrado volvió a caer durante agosto, con una particular fuerza en el sector privado: la baja fue del 0,1% para los registrados en general y del 0,2% para los registrados privados. De esa forma, desde noviembre, se perdieron 223.796 puestos de trabajo, en una dinámica que fue en paralelo a la del salario, que también ajustó en forma contractiva durante el período.
Los datos fueron publicados por la Secretaría de Trabajo a través del informe Situación y evolución del trabajo registrado, que se realiza en base a los números del SIPA. Además, la Secretaría también publicó el informe de la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) que adelantó números de septiembre, con otra baja del 0,1% para el sector privado.
El investigador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA - Autónoma, Luis Campos, afirmó: "Muy malos los datos de empleo registrado de agosto (SIPA). La caída acumulada contra noviembre de 2023 llegó a 223.796 trabajadores. En agosto el golpe más fuerte lo sufrió el sector privado que ya está en los niveles más bajos desde el inicio de la gestión de LLA. En agosto perdieron su puesto 10.555 trabajadores del sector privado, 1.735 del sector público y 772 de casas particulares. Contra noviembre de 2023 la caída ya está en los máximos para las tres categorías. El monotributo sigue subiendo".
Y agregó: "La dinámica en el sector privado es preocupante. Luego de la fuerte caída en el primer semestre de 2024 había comenzado una leve recuperación. Este rebote se frenó a comienzos de 2025 y a partir de junio empezó una nueva fase de destrucción. El retroceso del empleo en el sector privado comenzó unos meses antes del cambio de gobierno. Contra agosto de 2023 estamos hablando de 177.648 trabajadores menos. Los niveles actuales están por debajo de los de 2015".


#39544124   Modificada: 12/11/2025 21:23 Cotización de la nota: $375.432
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