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28/10/2025 Cronista.com - Nota
EL CRONISTA COLUMNISTAS AMOR OPINIÓN Hay temas que atraviesan a todos los seres humanos: uno de ellos es el amor Lourdes Prado Mendez - Escritora/Guionista ¿Querés dejar tu opinión? Registrate para comentar este artículo. Un tema que preocupa a muchas personas dentro del espectro autista es que no pueden elegir dónde ni con quién vivir. Lo primero que pensé fue en el trabajo: para sostener un hogar es necesario tener un empleo, y el 80% de esta comunidad autista está desempleada. Pero después lo miré de otro modo. Incluso ese 20% que sí logra acceder a un trabajo puede sufrir el mismo desgarro: no poder elegir a quién amar ni con quién compartir la vida . Tal vez la dificultad no esté solo en lo material, sino también en las creencias y los miedos de quienes rodean a la persona neurodivergente o con cualquier discapacidad. Con frecuencia se les niega esa posibilidad de elección por considerarla riesgosa o inapropiada. Pensar en alguien neurodiverso ejerciendo plenamente su libertad implica romper prejuicios, cadenas y mandatos que se han sostenido por siglos. La libertad del corazón requiere coraje, no solo de quien la ejerce, sino también de quienes acompañan. Reconocer que la persona puede decidir por sí misma -aunque eso desafíe normas arcaicas- es un acto de amor y respeto. De lo contrario, bajo la idea de "cuidar", se termina siendo cómplices de su dependencia y de su tristeza, silenciando deseos que también son legítimos. Otro mito frecuente es creer que vivir solos es imposible, por la necesidad de apoyos que algunas personas con diferentes discapacidades requieren. Sin embargo, si se implementara plenamente la Ley de Asistencia Personal, esa utopía se volvería una posibilidad concreta. No se trata de negar los apoyos, sino de ofrecerlos para que la elección sea viable. La Ley de Asistencia Personal es una deuda pendiente. Su regulación permitiría reconocer el rol del asistente personal como un apoyo esencial para la vida independiente. No se trata de un profesional de la salud, sino de una figura que actúa como una extensión de la persona, alguien capacitado para acompañar en tareas cotidianas y en la autonomía. Para acceder a esa capacitación solo se requiere título secundario. Una organización que viene impulsando este derecho desde hace años es la Asociación Azul, de La Plata, donde algunos de sus referentes son Juan Cobeñas y Julián Vázquez. Romper cadenas requiere confianza y la osadía de generar un movimiento profundo que devuelva a cada persona su derecho a elegir dónde y con quién vivir. El amor, como la vivienda, no debería ser un privilegio ni un puerto lejano. Es un camino que todos tenemos derecho a recorrer. Mientras persistan la fuerza, la justicia y la posibilidad, habrá caminos que sigan escribiéndose -como el de la asistencia personal, que puede transformar vidas-. Este es un llamado explícito a su plena implementación, un reclamo compartido por el colectivo de personas con diferentes discapacidades. Porque cuando se acompaña con respeto, cuando se ofrecen los apoyos adecuados, todo es posible . Y a quienes temen que algo pueda salir mal, les diría: ¿quién no cruzó un océano para llegar a su puerto? Nadie tiene derecho a quitarles la oportunidad de vivir lo bailado -toda persona, incluso con apoyos o necesidades específicas, tiene derecho a vivir, amar, equivocarse, decidir, experimentar, frustrarse, sonreír, saber lo que es haberlo intentado-, porque no permitir bailar equivale a controlar o negar la autonomía. Porque siempre, el poder de decisión, el amor, los derechos humanos y el respeto serán la respuesta. Más Videos Comunicate con nuestro centro de atención al cliente de L a V de 9 a 17 hs al 0800-222-7664 atencionalcliente@cronista.com y te responderemos lo antes posible. Imagen: cronista.com
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