27/06/2025 08:00 Urbana Play - De acá en más
Editorial de María O'Donnell María O'Donnell - conductora RESUMEN: En su análisis sobre las presentaciones de Javier Milei, María O'Donnell destaca la agresividad y el tono belicoso de sus discursos, que incluyen insultos hacia sus oponentes, particularmente hacia el gobernador Kicillof. O'Donnell critica la reacción de los medios, que evitan mencionar las descalificaciones de Milei, calificando esta omisión como un acto de 'sane washing'. Ella argumenta que esta actitud naturaliza el discurso violento y ofensivo, lo que es perjudicial para la democracia. La reiteración de descalificaciones y la construcción de un "enemigo" fomentan un ambiente hostil que va en contra de los principios democráticos y de respeto mutuo. --- TRANSCRIPCIÓN COMPLETA: Con María O'Donnell. Un tutorial para tiempos complejos. Javier Milei tuvo dos presentaciones públicas a lo largo de los últimos días. Una ayer en el plenario de La Libertad Avanza en La Plata, que fue un poco el lanzamiento de la campaña de los libertarios en La Plata, en la provincia de Buenos Aires, para las elecciones del 7 de octubre, primero, 7 de septiembre, perdón, que son las elecciones locales. Después, en octubre, las elecciones en las que se votan diputados nacionales, mientras siguen negociando con el PRO. Bueno, Milei prometió una vez más pintar de violeta a todo el país, pero lo hizo. Esta vez se había hablado un día antes en el Yacht Club y son dos discursos que son muy parecidos en términos del tono, el nivel de agravio, el nivel de insultos que profirió Javier Milei. Hicimos un compilado que me gustaría escucharlo con ustedes. Lo tenemos ahí, Leo. Nunca se le pasó por la cabeza a este pelotudo bajar el gasto público. Orcos infumables, parásitos mentales. Malnacidos, lo único que les importa es el poder. Todos estos parásitos mentales del partido del Estado. Tío, Kicillof es el burro en eunuco. Es decir, estaban rompiendo el culo al sector privado de una manera homérica. Entonces, mientras que las basuras, las ratas inmundas. Soy cruel, cucas inmundos. Soy cruel con ustedes, con los que les rompen el culo a los argentinos de bien. El enemigo ha sido identificado. Bueno, esto fue en 24 horas. Seleccionamos un poquito: rata, inmundo, el enemigo ha sido identificado, con ellos soy cruel. O sea, la idea de que ese enemigo es una rata inmunda, un parásito mental, que a quien además la respuesta es bélica en este caso. Poner el último clavo en el ataúd del kirchnerismo, liberar la última batalla e ir a un discurso bélico. Esto mezcla dos cuestiones. Por un lado, la idea de atribuirle al adversario político ser un enfermo, un orco, con el componente adicional del discurso del gobierno, particularmente de Milei, sobre el cual ya hemos hablado, que es la cuestión de la sexualidad brutal en el discurso. Así como los mandriles son aquellos que tienen la cola perforada rojiza, dado que es una penetración, se entiende que no voluntaria, porque bueno, en todo caso, habrá situaciones en las que eso sea algo que alguien elija, pero en este caso no, por eso queda todo rojo y lo vive además como una idea del triunfo. Hoy está llena las redes sociales de Milei hablando sobre mandriles. Bueno, a la de mandriles le suma ahora la del burro eunuco. La del burro eunuco, durante todo el discurso estuvo hablando acerca de que Kicillof es bajito, burlándose de la altura de Kicillof. Tema por el cual al presidente aparentemente también le preocupa su propia altura, una tontería. A mí realmente me parece que burlarse del aspecto físico de alguien... Pero en todo caso, él habla de Kicillof como un enano, además de decirle soviético, ocupante del Kremlin y demás, estalinista, etcétera, que tiene más que ver con asociarlo, en todo caso, a una izquierda extrema comunista. En el caso del burro, la imagen que utiliza sobre Kicillof es un burro eunuco, porque el burro, la idea es asociarlo a que es bruto, pero a la vez tiene un pene muy grande. Entonces, dado que dejarle un pene grande sería algo que en la visión del presidente es un atributo que Kicillof da, las características que tiene. Si el pene grande es algo bueno, no se lo puede dar. Entonces le dice burro por bruto y eunuco porque es un burro pero que no tiene pene. Este es el nivel de conversación que tiene Javier Milei con el gobernador de la Provincia de Buenos Aires. A mí me llamó tanto la atención, ayer me puse a escuchar los dos discursos enteros, mientras después veía lo que pasaba en los canales de televisión más afines, e incluso casi todos, pero sobre todo los más afines al gobierno. No decían una palabra, decían: 'Milei atacó a Kicillof', 'Milei se puso picante', 'arrancó la campaña en la Provincia de Buenos Aires', pero ninguno decía parásitos mentales, burro, pelotudo, nada de eso, burro eunuco. ¿Y por qué? Porque yo creo que hay, obviamente, digamos, me parece que los más afines eligen no mostrar esa cara de Milei o fingen que no la escuchan. Hay algo de hacer de cuenta que eso no pasa y yo creo que es grave esa actitud porque pasa y porque es la palabra presidencial y porque no nos debemos acostumbrar. Hace un tiempo, una gran ensayista y escritora que se llama Siri Husbeth escribió un texto, creo que lo publicó el New York Times, acuñando un término que se llama 'sane washing'. ¿Se acuerdan que cuando eran todas las cuestiones de si había algo muy machista se hablaba de 'pink washing' o 'green washing' con las cuestiones medioambientales? Aquellas políticas que buscan contrarrestar si son muy machirulo, haces alguna cosa para parecer que no lo sos o si estás contaminando mucho el medio ambiente, haces una campaña para algo, bueno, como limpiarte de aquello de lo cual te acusan o de aquello que estás haciendo. Entonces, 'sane washing' es como decir que aquellos, en este caso lo escribía Siri con relación a Trump, pero era la idea de 'vos no citaste actualmente aquello que dice la persona para fingir que no lo dice y entonces parece una persona sana'. 'Sane washing', hacer de cuenta que esa persona es sana, que paradójicamente sería como fingir demencia y hacer de cuenta que eso no pasa. ¿Por qué? Porque eso va naturalizando además, decía Siri Husbeth, el discurso fascista en el nazismo, en el origen del nazismo y todo también es muy común la atribución del tipo de enfermedades y el tipo de discurso donde el otro se convierte en orcos, un monstruo, un parásito mental, alguien que tiene enfermedades. De hecho, Milei cita al segundo de Kaiser, se llama de apellido, un chileno que es el segundo de la fundación Faro debajo del Aje, que es el ideólogo principal de Milei, que fueron además los que armaron el discurso de Davos. En su momento, el discurso de Davos tuvo muchísima repercusión, básicamente porque asimilaba la idea de que los homosexuales eran enfermos y depravados, otra de las cosas muy presentes en el discurso del presidente cuando habla de los depravados fiscales, que tiene que ver con la elección nuevamente de cuestiones sexuales, pero bueno, decía que Kaiser era el que habló de que, fue a televisión, lo dijo en la Nación Más y dijo que los progresistas tienden a tener mayores enfermedades mentales. Entonces, hay una mezcla en este discurso que los medios o mucho los medios fingen que no existe, entonces hacemos de cuenta que no dice lo que en realidad dice, sumado con la idea de meter bala, que es un discurso muy presente también en Spert, pero la idea del enemigo ya fue identificado, que ese es el discurso de la dictadura, la idea de que había un enemigo, que entonces ya no había que librar una guerra con terceros países, sino que la guerra se libraba fronteras adentro contra un enemigo al que había que aplicarle las reglas de la guerra y no el código penal o el código civil o el código que fuese o el poder judicial, sino la guerra, la guerra no convencional. Ese fue el inicio de la idea de abrir las puertas a un estado de excepcionalidad, donde el otro, que es algo que es muy presente también en el discurso de Patricia Bullrich, la idea de 'son todos terroristas' y demás. La verdad es que lo que elige el presidente como tono y la respuesta de la mayoría de los medios es extremadamente preocupante, porque hacemos de cuenta que no pasa lo que pasa y hacer de cuenta que no pasa lo que pasa lo convalida, lo naturaliza y en un sistema democrático, cuando uno se refiere así a los opositores, que hay que matarlos y no hay que ganarles en elecciones, antes era nada, ganarle en las urnas, ahora todo lo que aparece en el discurso y el presidente, lo peor es que cuanto mayores son, es una reacción que él tiene, tanto cuando se siente más empoderado o siente que las cosas le van bien, entonces se empieza a decir que son todos unos mandriles porque todos se equivocan y nadie le acierta y eres el único genio que nadie lo entiende. Hay una mezcla también de una cosa extremadamente vanidosa, la idea de este fantástico grupo y son los más maravillosos ministros que el mundo ha tenido y Toto Caputo es el mejor ministro de economía de la historia y este ya es cuando no cumplió dos años todavía el mejor gobierno de la historia, que hizo muchos mejores. Entonces la idea de que lo propio es maravilloso como nunca existió y lo otro ni siquiera es una persona, es un monstruo, es un pelotudo, es un orco, es un bruto, es un enfermo mental. Realmente como propuesta para ir a una elección, en este caso en la provincia de Buenos Aires, pero como discurso público, yo creo que tenemos que hacer un esfuerzo por no hacer el 'sane washing', perdónenme si insisto con esto, los últimos dos discursos del presidente realmente me parece que están escalando algo más. Habitualmente en Milei se habla de la motosierra, insulta y demás, pero a mí me parece, creo advertir realmente, realmente quiero advertir que en el discurso público, particularmente en el discurso del presidente de la nación, hay una escalada muy en línea con lo de Davos, que en su momento el discurso de Davos generó una reacción muy grande, pero son los mismos ideólogos: Laje, Kaiser, todo el sector, digamos, de la batalla cultural del gobierno viene de la mano de este discurso, que es un discurso extremadamente grave. Porque grave suena poco, pero quiero decir, es muy poco democrático, digamos, ¿cómo hace uno para tratar de educar a sus hijos en que no hay que burlar al otro, porque tiene algún tipo, porque es más bajito que el promedio, por lo que fuese? ¿Cómo tratas de hablar de las cuestiones, la sexualidad, el respeto, el no insulto y demás, si el presidente de la nación arriba de una tribuna, frente a gente que además lo aplaude, que esto es realmente importante también de señalar, muchos los empresarios y las audiencias, porque que los propios lo aplaudan, vaya y pase, pero este 'sane washing' del cual les estoy hablando, la idea de fingir que eso que pasa no ocurre, no solamente ocurre con los medios de comunicación más afines al gobierno, y a mí misma me da pudor. Esta mañana trataba de entender con David la figura del burro eunuco, o cuando hablo de que son los mandriles, pues si tengo que empezar a tratar de entender cuál es el agravio, cuál es el razonamiento que está detrás de esto y explicitarlo, me imagino que ustedes están yendo al colegio, llevando a los chicos, tampoco me agrada a mí poner estos insultos. Entonces muchas veces no situar textualmente lo que pasa es una forma de cooperar para que esto siga pasando y siga escalando, y me temo de verdad, pero de verdad, que es lo que estamos haciendo en este momento: un gigantesco 'sane washing' fingido.
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