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19/06/2025 08:00 Urbana Play - De acá en más
Editorial de María O'Donnell
María O'Donnell - conductora
RESUMEN:
María O'Donnell discute la reciente movilización de Cristina Fernández de Kirchner, quien se presentó ante miles en la Plaza de Mayo, a pesar de su condena a prisión. En su mensaje, defendió su liderazgo y la posibilidad de un retorno político, enfatizando su alianza con el kirchnerismo. Sin embargo, surgen cuestionamientos sobre su capacidad para mantener el liderazgo sin ser candidata, especialmente en el contexto de una potencial candidatura de su hijo, Máximo Kirchner. La autora explora las divisiones dentro del peronismo y las dificultades que enfrenta Cristina para consolidar su poder, evidenciadas por la falta de apoyo de diversos sectores, incluida la CGT. Finalmente, se plantea la incertidumbre sobre el futuro del liderazgo de Cristina en el partido y el impacto de su situación judicial en la política actual.
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TRANSCRIPCIÓN COMPLETA:
Más. Con María O'Donnell. Un tutorial para tiempos complejos. Ayer, una manifestación importante acudió a Plaza de Mayo, convocada por Cristina Fernández de Kirchner, a escuchar un mensaje grabado que envió la expresidenta entre sus primeras horas ya cumpliendo la condena a 6 años de prisión por un caso de administración fraudulenta por la asignación de obra pública a Lázaro Báez durante su presidencia en la provincia de Santa Cruz, y con una condena que incluye también la inhabilitación a perpetuidad para ejercer cargos públicos.
Cristina Fernández de Kirchner volvió a apelar a lo que siente que es su mayor fuerza, que es la fuerza de la movilización. Y fue una movilización, ayer el gobierno intentaba bajarle el número, planteando que eran 40 mil personas. Yo me fío mucho más por el número que hace el diario La Nación, que además viene sosteniendo un método para evaluar la cantidad de personas, que es la densidad de ocupación por la cantidad de metros, y me parece bastante más fiable.
Plantea el diario La Nación que había unas 158 mil personas en Plaza de Mayo. Cristina Fernández de Kirchner hizo escuchar un mensaje de 8 minutos, hizo un saludo también en vivo, y a lo largo de esos 8 minutos dijo: "vamos a volver, este gobierno tiene fecha de vencimiento, y a mí me proscribieron en el momento en que dije que quería ser candidata". Actuó el partido judicial porque lo que no querían era que yo me presentara a elecciones, como había anunciado que lo iba a hacer el 7 de septiembre en las elecciones provinciales en la provincia de Buenos Aires, como candidata en la tercera sección electoral.
Ese fue el planteo, no hay mucha novedad en el discurso de Cristina Fernández de Kirchner. Sí en lo que es, evidentemente, su vocación de, aún estando presa, aún estando condenada, aún estando inhabilitada para ser candidata, la pretensión de Cristina Fernández de Kirchner, en ausencia de otro liderazgo que hoy le pueda competir, es seguir ejerciendo el liderazgo del partido justicialista. Y ella se propone, además, como la persona que va a lograr esa nueva unificación detrás de la consigna "vamos a volver", que es la consigna que ha utilizado el kirchnerismo cuando perdió en su momento contra Mauricio Macri las elecciones del peronismo.
Pero bueno, para mí hay muchas preguntas alrededor de si esto es un objetivo que Cristina Fernández de Kirchner va a poder cumplir sin ser ella la candidata. Ayer mismo empezaron a hablar de la posibilidad de que Máximo Kirchner fuese el candidato. El hijo de la presidenta es alguien que hoy ejerce la presencia del partido justicialista en la provincia de Buenos Aires, pero que nunca logró tener una ascendencia que vaya más allá de La Cámpora, que fue la organización ayer dominante en la marcha en la Plaza de Mayo.
Él dijo ayer: "es raro porque si uno conoce los movimientos de Máximo Kirchner, no da reportajes". Recién me decía David, uno tiene que ver cómo va subiendo el perfil, y estuvo en C5N. Y empieza Máximo Kirchner a tomar mayor visibilidad pública. De hecho, Mayra Mendoza, que es la referente quizás más cercana hoy a la intendente de Quilmes a Máximo Kirchner, publicó un tuit que después borró, diciendo: "bueno, el candidato va a ser Máximo". Y ahí aparecen las limitaciones a las cuales me refería, porque ayer mismo Axel Kicillof no marchó con La Cámpora.
No habló nadie porque no lograron ponerse de acuerdo, porque hay una especie de exigencia de que todos los sectores del peronismo se subordinen a La Cámpora, razón por la cual finalmente Axel Kicillof marchó con su propia agrupación, que se llama Movimiento Derecho al Futuro. Y un poco lo que vimos es una plaza donde todavía nadie tiene ese poder de movilización, pero a la vez con ausencias muy relevantes. Había gente que movilizó, también de nuevo el trabajo hoy de La Nación es muy bueno porque, según la configuración de la plaza, marca quienes movilizaron en cada uno de estos lugares.
Entonces, territorialmente, movilizó fuerte Lomas de Zamora, que era el distrito Insaurralde de, hoy en manos de Otterman, que es un territorio donde sigue siendo fuerte La Cámpora. De hecho, a instancias de Máximo Kirchner, había sido que Insaurralde de se sumó en su momento al gabinete de Axel Kicillof, hasta que el escándalo de Klerich y el yate hizo que debiera renunciar. Estaba la gente de José C. Paz, de Mario Ixi, uno de los municipios que también ha sido siempre muy fiel al kirchnerismo dentro de los municipios del conurbano.
Y en cuanto a los gremios, que me parece donde mostró mayor debilidad, la convocatoria a la que se sumó ayer también la izquierda, por primera vez muy cercano, porque en su momento Miriam Bergman fue muy crítica de muchas cuestiones del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, pero en este caso la izquierda y gran parte de las distintas fuerzas que componen la izquierda acompañaron ayer en la plaza el apoyo a Cristina Fernández de Kirchner. Pero no aparece una solidaridad que, más allá de la izquierda, no hay más. Hay otras fuerzas políticas que estén acompañando el reclamo del peronismo kirchnerista que está diciendo que hay una afectación a la democracia por lo que pasó con Cristina Fernández de Kirchner.
Y con relación a los sindicatos, estaba el gremio docente, estaba Furlan. Creo que vamos a hablar ahora en un ratito con la gente de la Unión Obrera Metalúrgica, pero no mucho más. Están los bancarios de Palazzo, pero la CGT no hizo otra cosa que dejar libertad de acción, que es lo que hacen cuando no se pueden poner de acuerdo. No estaban los camioneros, con lo cual uno ve que están los gobernadores, poquitos gobernadores, muy poquito apoyo. Entonces hay algo donde siempre a Cristina Fernández de Kirchner le estaba siendo difícil sostener su liderazgo dentro del partido justicialista, que además viene de tener elecciones muy malas en las provincias del norte.
En algunas provincias de histórica presencia del peronismo, se disponía a rivalidar sus credenciales, yendo como candidata en el corazón del núcleo duro del conurbano, mucho más donde está la base electoral del kirchnerismo. Y por esta decisión judicial queda impedida e intenta, en base a eso, generar como un efecto contrario, que es un mayor apoyo a su liderazgo. Yo lo veo complejo. Uno ve, digo, si una conmoción grande dentro del kirchnerismo y demás, pero inmediatamente reaparecen las diferencias con Kicillof, aparece esta grieta muy inesperada dentro de la CGT, retasiándole el apoyo en el primer día en que los convocan Cristina Kirchner y el peronismo que la acompaña.
Me parece, me da la sensación que confía demasiado en reproducir cierta nostalgia y ciertas cuestiones de la memoria emotiva de lo que era el peronismo de Perón, del exilio de Perón, de la proscripción de Perón. Muchas de las cosas que circulaban ayer y que uno escuchaba en el discurso de los kirchneristas tienen que ver con eso y que yo me pregunto incluso qué tipo de referencias significan para un electorado que no tiene, primero, y un electorado joven que no tiene ni siquiera registro de lo que fue el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Cristina Fernández de Kirchner, en esos 8 minutos, ayer habló como del paraíso perdido, no de una Argentina paradisíaca durante los 12 años de kirchnerismo, que ya hay toda una generación que no tiene registro de aquella Argentina de la que habla Cristina Kirchner, más allá de que describa o no cabalmente lo que fueron esos años.
Pero, adicionalmente, mucho menos de lo que fue el peronismo de la proscripción de Perón, la idea del balcón, la idea de un líder que, proscripto, se vio obligado a, después de un largo derrotero por Latinoamérica, termina sentándose en Puerta de Hierro, en España. Ayer, Cristina Fernández de Kirchner decía: "les hablo desde San José 11 11", buscando la idea de la dirección. Cuando Perón vino la primera vez fue a Gaspar Campos, cerca de la Quinta Olivos. Cuando volvió en el 72, después, cuando se había levantado la dictadura de Lanús, a que se levantara la proscripción del peronismo, que duró casi 2 décadas después del golpe militar que le dan a Perón en el 55, Perón termina liderando al peronismo a través de las cintas magnéticas.
O las tuvo algunas grabaciones en aquel momento con este Pino Solanas y los que grababan al General y la palabra del General y los que viajaban a Puerta de Hierro, entonces volvían con el mensaje de Perón, que intentaba mantener ordenado lo que era el peronismo a la distancia en aquel momento. Había surgido toda la juventud, después el 70 con los guerrilleros y demás, y tenía un lado la izquierda del peronismo con las guerrillas que emergían, y del otro lado el peronismo ortodoxo en los sindicatos, que era su base electoral tradicional.
Iban a un choque que, finalmente, termina en una fuertísima confrontación. De hecho, Montoneros mata Ruchi, que era el titular de la CGT, que era una persona muy leal a Perón. Pocas, poco enseguida, después de que Perón logra ganar su tercera presidencia, y ahí se desata un conflicto por el cual Perón nunca logra, finalmente, aunar todo eso. Por suerte, esa situación de violencia ya no existe. Tampoco estamos en una dictadura, pero aparece algo que sí me parece que vuelve a plantear el problema para Cristina Fernández de Kirchner, que tiene alguna similitud, eso sí, con lo que pasaba con aquel Perón, que son que los primeros que se le escapan de las manos son los sindicatos.
Porque hay una paradoja bastante grande, que es que el modelo sindical de la época de Perón es un modelo que le da mucho poder al Estado, al Gobierno, al poder ejecutivo sobre los sindicatos, porque le tiene que convalidar las conducciones, porque ratifica las paritarias, las tiene que aprobar en la Secretaría de Trabajo, porque a través del Estado se recaudan los fondos de las obras sociales, que después reparte el poder ejecutivo entre las obras sociales. Los sindicatos, hay mucho poder de negociación entre el poder ejecutivo, siempre por el modelo que dejó Perón, y era el problema que tenía Perón.
Por eso Perón solía decir que Ruchi es el único sindicalista que me es leal, creo que decía Perón, pero la idea que Perón sabía que, estando lejos del poder, le pasó con Vandor, que también fue asesinado, pero la idea de que le pasaba a Perón era que desconfiaba que los sindicatos, mientras él no estuviera en el poder, se le iban de las manos porque buscaban la negociación personal de sus propios beneficios con el gobierno de la Nación, con el gobierno de turno.
Bueno, eso yo creo que le pasó a Cristina Fernández de Kirchner, y la verdad es que me parece que le va a ser muy difícil a través de la idea del balcón, y sobre todo por la imposibilidad de transmitirle el liderazgo a Máximo Kirchner. Me parece que, en este estado de situación, el liderazgo de Cristina Fernández de Kirchner, que pretendía imponer sobre todo a La Cámpora, por encima de otros espacios dentro del justicialismo del partido justicialista, se le hace más cuesta arriba todavía. Por ahora, la pregunta era: ¿esto va a empoderar a La Cámpora o aquellos que pueden llegar a tener el poder delegado de Cristina Fernández de Kirchner o los va a debilitar? Bueno, es una pregunta que está abierta.
Ahora tienen que hacer el armado electoral para el 7 de septiembre y hay ahí otro síntoma también del límite que encuentra el poder de Cristina Fernández de Kirchner, aún en estas circunstancias, que es que Kicillof marchó, pero a pesar de que le insistieron con que tenía que revisar la idea de desdoblar elecciones y que se vote todo junto en la provincia de Buenos Aires, los diputados nacionales y las autoridades locales, Kicillof ayer mismo dijo: "bueno, las hace unos días ya había dicho". Pero, digamos, después que la Corte Suprema confirmara la condena a Cristina Fernández de Kirchner, Kicillof dijo que mantiene el escenario desdoblado y todavía no se sientan a negociar.
Tienen que inscribir las candidaturas el 9 de julio, o sea, falta muy poquito, y aún después de este evento, que fue un sacudón terrible de Cristina Fernández de Kirchner, no logran sentarse en una mesa de negociación para armar las listas conjuntas, que supongo que tarde o temprano va a terminar ocurriendo. Ayer, Sergio Massa sa puso un tuit diciendo: "unidad más que nunca", una cosa, pero la verdad es que muchas de las dificultades que tenía Cristina Fernández de Kirchner para ejercer el liderazgo dentro del partido justicialista, que además está en franco retroceso dentro de las elecciones en el resto del país, me parece que se están viendo agravadas más que potenciadas por esta situación de Cristina Fernández de Kirchner en prisión, que tampoco logra generar, más allá del espectro del peronismo, dentro del espacio kirchnerista, la solidaridad de otras fuerzas políticas en su momento.
Pero volviendo a las referencias de aquella época, cuando vuelven en el 72, se abrazan con Balbín, con la idea de que las grandes fuerzas democráticas iban a estar juntas para lograr las elecciones.
| #27052403 Modificada: 19/06/2025 10:54 |
Duraci�n del audio: 13' 03"
Cotización de la nota: $19.575.000
Audiencia: 150.000
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