15/02/2025 Clarin.com - Nota

Macri amaga un contraataque
Ignacio Zuleta
El ex presidente busca exhibir la orfandad del gobierno de Javier Milei, que le pone nubarrones hacia el futuro.

El PRO macrista hará en las próximas horas un desfile de fuerzas en varios frentes. Procura poner a prueba a su dirigencia de todo el país, y a su militancia, si está en condiciones de ir a las elecciones legislativas solo, o en alianza con la derecha extrema que representa La Libertad Avanza , el whatsapp que soporta (en toda la extensión del término) a Javier Milei.
También busca exhibir la orfandad del gobierno de Milei, que le pone nubarrones hacia el futuro. Esa debilidad llega al extremo de que las quejas de Macri y Carrió y los discursos del jueves pasado de Nicolás Massot y Maxi Ferraro –de Encuentro Federal y la Coalición Cívica, dos bloques minoritarios- le voltearon al gobierno la oscura licitación de la Hidrovía. Fue un triunfo de la política por sobre los negocios, planeta de donde proviene el actual gobierno.
En la misma sesión, un dictamen en disidencia del bloque de Pichetto, defendido por Oscar Agost Carreño, hizo caer la cláusula que había puesto Luis Petri en la ley de Ficha Limpia que les permitía a los jueces determinar quién puede ser candidato, y quien no, según la fecha de la sentencia. Hijo del rigor, al gobierno hay que recordarle a cada rato quién es David y quien es Goliat.
Si el espectro del voto de centro que se volcó en 2023 en favor del actual presidente divide el voto del no pejotismo, el oficialismo corre el riesgo de perder en distritos insignia, como la provincia de Buenos Aires, ante un peronismo unido.
Esa división del voto no peronista depende de si el PRO macrista sigue literalmente las expresiones de agravio de Mauricio Macri por el destrato que recibe del presidente y su entorno, o si muerde el freno y se pone debajo del mileo-bullrichismo gobernante. Ya el ala bullrichista se subió al gobierno antes de que Milei jurase en el cargo.
El presidente se abrazó a ellos porque asumió con lo puesto, que no era mucho. Macri por su lado cometió un error que su fuerza está pagando ahora: extremó el apoyo incondicional a Milei en el momento cuando éste más lo necesitaba, que fue el primer año de su desamparada gestión. El crimen no paga y ahora no tiene cómo facturar ese apoyo. Sólo recibe desprecio.
Macri repite el mismo traspié que cometió en 2015 cuando asumió la presidencia y se entregó a una alianza a tumba abierta con Sergio Massa. Confundió, como los pilotos obnubilados, el mar con el horizonte. Le cedió poder en la provincia de Buenos Aires, le dio cargos y lo exhibió en Davos como propio.
Massa, en lugar de agradecérselo, aprovechó ese poder regalado para preparar una plataforma propia que le dio fuerza incluso después de perder las elecciones. No había entrado en el ballotage en 2015 y a finales de 2017 emprendió el retorno al cristinismo.
Centenares de funcionarios del Ejecutivo pertenecen a la demografía del PRO macrista y de Cambiemos. Es entendible: aportaron el voto que lo hizo presidente a Milei y se sienten con derecho a ocupar cargos en un gobierno que consideran propio .
Son propietarios, no inquilinos. Olivos los llama con la flauta de Hamelin - hasta ahora es una aventura sin red – para llenar una cáscara vacía de gente y de programas. Corren a enfilarse porque Mauricio insiste con que no quiere ser candidato a nada y los deja sin proyecto. Liderar es construir futuro.
La percepción de esos sectores es que el proceso que desencadenaron en 2023 puede ser derrotado por el peronismo, al que Milei halaga con trapos rojos, como designar a Ariel Lijo en la Corte. Pero si Milei se derrumba, habrán perdido otra oportunidad sobre la tierra.
La reacción de los dirigentes de este sector es clave para comprender los movimientos del centrão criollo. La inclinación proMileista gravita mucho en la provincia de Buenos Aires . Este lunes en la sede partidaria de la calle Balcarce los dirigentes del PRO de ese distrito y los legisladores provinciales y nacionales están convocados por Cristian Ritondo para discutir si van juntos con La Libertad Avanza, o se juegan un pleno yendo solos.
Hay un factor clave en esta decisión: el mejor candidato a diputado nacional del sector es, según las encuestas, Diego Santilli, que está convencido de que deben jugar en alianza con LLA. No está previsto, por ahora, que Macri aparezca en ese concilio.
Ante un escenario electoral cabe preguntarse si la reacción de esos dirigentes de centroderecha representa a la de su electorado. Milei presume que sí y manipula las relaciones con esa colectividad para convertirse en el jefe de una centroderecha que en la Argentina siempre ha sido una minoría.
La dificultad de ese proyecto es que el voto del 42% que representó a los moderados desde 2013 no es de centroderecha. Ha sido un centro-centro que contuvo al PRO y a los conservadores hoy mileístas, junto a los radicales y la Coalición. Agitar el temor a una restauración cristinista busca polarizar en torno al terror de que vuelvan después de un fracaso.
El recurso no funcionó en 2019 y el peronismo cristinista volvió con Cristina sonriendo desde un carro triunfal, aunque reducida a una inservible vicepresidencia que sólo sirvió para demoler al gobierno que ella misma había creado con Alberto Fernández y Sergio Massa.
Es difícil que en política alguna vez algo salga bien, si es cierto que todo emprendimiento colectivo está condenado al fracaso, salvo especial asistencia de una gracia que es difícil que descienda sobre los mortales. "Si los hombres fueran ángeles, no sería necesario el Estado" , escribió en El Federalista (1788) James Madison, que se nos fue, pero aún nos guía.
La exhibición de fuerzas de Macri es para mostrar el compromiso del PRO macrista con competidores fieros del mileísmo en distritos con elecciones adelantadas: Santa Fe y CABA. Son los distritos 3° y 4° en cantidad de votantes.
En CABA Mauricio se aferra al primo Jorge en el empeño de adelantar los comicios para el 11 o el 18 de mayo, y sin PASO . El calendario se disparará en cuanto el Senado apruebe la suspensión de las primarias, lo que ocurrirá esta semana.
El voto del peronismo al proyecto depende de cómo lo tramite el bloque cristinista. Tratarán de mantener la unidad en lo nacional y en el distrito. Con eso resuelto, el peronismo de la legislatura porteña habilitará la suspensión.
Mauricio mueve otras piezas que parecen preparar un desembarco. Una es retener la migración de Néstor Grindetti, ex jefe de gabinete de Jorge, hacia La Libertad Avanza. Grindetti permanecerá junto a los Macri en la ciudad y también armando cuadros en la 3ª. sección electoral, donde fue intendente de Lanús.
Otra decisión es la designación de Francisco Quintana como secretario de Justicia en el gabinete del primo Jorge. Es importante porque expresa el interés por intervenir en la organización del sistema judicial de la ciudad. Es una manera de mirar al futuro en un terreno espinoso para Mauricio desde antes de dedicarse a la política, y que no cuidó cuando tenía el poder en las manos . Siendo presidente rechazó una ampliación de la Corte Suprema que le ofrecía el bloque Pichetto del Senado.
También la posibilidad de designar nuevos jueces, al Procurador de la Nación, al defensor General de la Nación, un miembro de la Cámara Nacional Electoral, etc. Tenía en su momento un terreno abierto para negociar, pero lo rechazó como si no pensase en el futuro de la coalición que integraba.
Para mostrarle al mileísmo que se le puede ganar en una elección en otro distrito importante, Macri y la mesa chica del PRO se constituirán el martes de esta semana en Rosario de Santa Fe, la tercera provincia en cantidad de votos. Maxi Pullaro armó una lista de candidatos a convencionales que reformarán la Constitución Provincial.
Esa lista está integrada por radicales, socialistas, PROs e independientes. Tiene ventajas ante La Libertad Avanza, que carece, como en muchos distritos, de anclaje territorial. El peronismo, por su parte, está dividido en varias listas. Pullaro emprendió la táctica de adelantar las elecciones a cargos locales. Serán el 13 de abril, junto a las de convencionales.
La frutilla del pastel a darle otro mandato al gobernador. (Si sale, Mendoza será la única provincia sin reelección.) La nómina la integró Pullaro y en los primeros lugares va gente del PRO y del socialismo de Santa Fe, como Germana Figueroa Casas (avalada desde Cumelén por Macri) y Lionella Cattalini.
No aparecen figuras conocidas como la vicegobernadora Gisela Scaglia, que se bajó a cambio de la promesa de acompañar a Pullaro en un nuevo mandato, si les sale. También se quedó afuera el exgobernador socialista Antonio Bonfatti. En la reunión con Macri, Pullaro le planteará la necesidad de no nacionalizar unas elecciones que prefiere sean bien locales.
En un movimiento discreto pero que también marca diferencias con el oficialismo nacional, Pullaro recibió el jueves pasado en su despacho a Horacio Rodríguez Larreta. Estaba acompañado por el diputado del PRO Álvaro González, que representa a su partido en sillas claves de la gobernabilidad.
Está en el Consejo de la Magistratura y ronca fuerte en la Comisión Revisora de Cuentas que vigila a la Auditoría General de la Nación. Larreta viaja por todo el país a pedido de gobernadores que quieren escuchar algo sobre su experiencia de gobernar la CABA junto a Macri durante 16 años, cuatro mandatos seguidos que el público reconoció reeligiendo al primo Jorge.
Larreta deshoja la decisión de ser candidato en CABA este año. Si el PRO va en alianza con LLA en la elección del Senado, especula con competir por una banca de senador por la minoría. Si van separados puede ser candidato a legislador. Esta categoría crece en importancia porque ofrece un rol para ganarle al mileísmo en el distrito. Por eso la Legislatura les atrae a Jorge Telerman y a Martín Lousteau.
La tercera demostración de fuerza de Macri ocurrirá el jueves en la quinta de Jorge Triaca , su principal asesor polític o. Encabezará una reunión con medio centenar de dirigentes del PRO que se identifican con la Generación de 2015.
Son dirigentes que comenzaron su carrera política en el mandato de Macri, ocupando cargos y representaciones legislativas, que hoy rondan los 40 años. Representan, según la convocatoria que maneja el santiagüeño Facundo Pérez Carletti, (secretario del partido) gente joven, pero con experiencia.
La idea es mostrarlos como una franja que ni el radicalismo ni el peronismo tienen, ni tampoco LLA, que es un partido de inexpertos que tienen dificultades para gestionar. Entre los llamados a la foto están Nacho Torres, Martín Yeza, Clara Muzzio, Soledad Martínez (las amazonas de Jorge Macri), Facundo Manzoni (intendente de Viamonte, Córdoba, el de la boina, que pelea por TV contra las retenciones), Martín Maquieira (diputado pampeano) y Esteban Allasino (intendente de Luján de Cuyo, sucesor de Omar de Marchi).
Con Quintana a cargo de Justicia, asume en CABA un experto en los túneles de la justicia porteña con terminales valiosas para asegurar futuro: es macrista la de mesa chica de Mauricio; integra la mesa federal del PRO (atiende la región del NOA, donde hay mucho "peluca"); tiene la mejor relación con Daniel Angelici, (garantía de las relaciones con los radicales, con quienes Jorge tiene la mejor y quiere seguir teniéndola, como con Elisa Carrió); y trabajó en las PASO para Horacio Rodríguez Larreta. Si no existiese habría que inventarlo.
La tarea de Fran Quintana, que el sábado de la semana anterior parlamentó discretamente con Guillermo Francos en el cumpleaños del sindicalista Dante Camaño, es construir el demorado traspaso a la ciudad de la justicia nacional.
Lo precipitó el trajinado fallo Levinas de la Suprema Corte, que amplía el poder, como instancia recursiva de la Justicia Nacional, al Tribunal Superior de CABA. Los Macri tienen gran interés en que la ciudad tenga un sistema judicial poderoso, más allá de la importancia del destino de algunas causas.
Por eso, tan importante como la exaltación de Fran Quintana (que fue además directivo de Boca Juniors) es el cargo que asumirá Jorge Djivaris. Es quien le deja el cargo a Quintana y asumirá una secretaría letrada del Tribunal Superior, que el macrismo entiende es central para trabajar en la construcción de este nuevo sistema. Es una plaza en la que hay que tener gente propia, y Djivaris ha sido funcionario de Larreta en la procuración de la ciudad y tiene experiencia en la justicia comercial, fuero del cual está de licencia.
En este empeño se probará la voluntad del gobierno de Milei para pactar algo con el macrismo . En el traspaso de la justicia hay traspaso de fondos. Es una prueba de poliamor. La Suprema Corte enfrenta un conflicto con los jueces nacionales que no reconocen la instancia del TSJ porteño como tribunal de alzada de sus fallos. Se prepara para dictar un mandoble que ratifique el reconocimiento del TSJ.
La amenaza de Lijo molesta en la Corte y se medirá cuántas ganas tiene el gobierno nacional de darle el gusto al macrismo o si continuará la línea agresiva que heredó del peronismo. Esa rispidez le costó la cabeza a Juan Carlos Maqueda, a quien no le permitieron seguir en el cargo por la edad. Fue algo inconsistente en un gobierno que se prepara para aumentar la edad jubilatoria

#14073064   Modificada: 15/02/2025 01:32 Cotización de la nota: $2.015.000
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